jueves, febrero 26, 2015

JUVENTUD INFINITA - "Juventud Infinita"



Me ha sorprendido, y mucho, el primer largo de Juventud Infinita, trío chileno/argentino radicado en Barcelona: tiene, en realidad, todo lo que le pido a un disco de punk y a un disco de hardcore. 

Primero, suena sólido y al cuello, rabioso, expresionista e incisivo, como una guerra relámpago. No se anda por las ramas.

Segundo, pese a que los rastros de algunas influencias se pueden detectar, es plenamente propio y no apesta a copia barata como el noventa por ciento de lo que uno escucha últimamente. Si es cierto que algo de Mudhoney habrá en la estructura y la chicharra wha de “Markarm” (el título lo indica, suponemos), que el fantasma de Hüsker Dü planea poderoso sobre algunos momentos (el solo de “Llamando al desorden”, la secuencia de acordes y breaks de batería que abren “Basta”), y que la fórmula velocidad+agresión+verdades cantadas a la jeta no es nueva, también lo es que Juventud Infinita se las arreglan para que la cosa no suene a ya escuchado, para ser puramente ellos mismos y para que ese viejo resorte que obliga a la acción y al movimiento salte de inmediato. Triunfo. 

Tercero, el trabajo instrumental, aún dentro de unos parámetros más o menos “clásicos”, es fuertemente original. No están todo el rato intentando epatar, pero tanto la batería de Katafu (también en Familea Miranda) como la guitarra de Oly (también en Robots) transitan de cuando en cuando por caminos sorprendentes por lo personal. Quizá el momento más llamativo a ese respecto sea el chirriante, feista y soberbio anti-solo de guitarra de “Bubarda”, que es en sí mismo una incómoda declaración de principios punk.

El bajo de Bati lo ata todo a tierra y las voces, expresivas, cabreadas, a contrapelo, hacen el resto escupiendo en español un mensaje comprensible que no por conocido tiene menos fuerza: “No dejes manipular tus ideas”. “No podemos aceptar que destruyan tu ilusión”. “Es la hora de volver a pensar”. Vale, lo hemos oído antes, es casi patrimonio común del punk y del hardcore, pero es cierto, ¿verdad? Pues eso. Si nos unimos a la idea de Chuck Dukowski (Black Flag) de que “la música trata sobre la verdad”, aquí hay de las dos, música y verdad, para parar un tren.

Si a esos temazos de pelaje encabronado y actitud indudable que conforman el grueso del disco se le añade un ocasional gancho pop (“Hora D”) y un par de barrabasadas de ultracore (“Basta”, “Karuja”), ya tenemos un artefacto casi perfecto en su agreste esplendor. Cierran con “La de Slayer”, cachonda y fugaz patada final para un trabajo que nada tiene de metal y mucho de todo lo mejor que el punk lleva décadas dándonos: libertad, claridad, potencia, mala hostia bien dirigida y esa vieja y necesaria sensación de que la pelea es necesaria y, en el fondo, nos gusta.

Pronto estará en la calle. Píllatelo. En su modestia, es soberbio.


domingo, febrero 08, 2015

Nuevas maneras para el viejo lobo - KP INFORMA



Después de siete años de actividad mensual continuada, KAPUT se va a tomar un respiro. No desaparecemos, porque la muerte no existe, pero probablemente publicaremos más espaciadamente y usaremos esta plataforma para servir de apoyo a nuestro nuevo proyecto, KARATE PRESS. Se trata de una revista trimestral que verá la luz en mayo y donde, con un excelente grupo de colaboradores, trataremos de hacer lo de siempre pero mucho mejor. Es decir, hablar de música original, de contracultura en general y en particular y de todos aquellos temas que nos parezcan relevantes y que quedan fuera del radar de otras publicaciones generalistas; mantener una ética de fanzine pero cuidar las formas, la profundidad, los enfoques, los contenidos y la estética para crear un elemento único y no clasificable que -esperamos- llegue a todos los que nos habéis seguido por aquí y a muchos más. KARATE PRESS no deja de ser la continuación natural, más sabia y mejor enfocada, esperamos, de aquel KAPUT en papel que, tras cinco gloriosos y guerrilleros números, terminó convertido en este blog. También de una tradición de prensa ácida e independiente que tiene un buen número de precedentes históricos, también en este país, y que sigue floreciendo en los subterráneos, en todos esos zines de alcance local, a menudo brillantes. Esperamos vuestras sugerencias, opiniones, insultos y regalos. Está dedicado a todas las almas libres. Seguiremos informando. Salud.

(Imagen: un día cualquiera en la redacción. C. Iscariot sisándole tabaco a la Madre Superiora)